El pasado 2 de mayo celebramos el Día Internacional Contra el Acoso Escolar, uno de los problemas más persistentes en las aulas de nuestros hijos.
Según los últimos estudios, uno de cada cinco niños sufre bullyng en nuestro país por sus propios compañeros de clase. Psicólogos, padres y docentes se han unido para reinvindicar la importancia de la educación en esta lucha que cada vez se cobra más víctimas. Por ello queremos recomendaros algunos cuentos infantiles que puedan ayudar a nuestros hijos la importancia de respetarse los unos a los otros.
Isla Granota. Juanita Acevedo
Es una lectura perfecta para reforzar la confianza de nuestros hijos desde la infancia. El lector se encontrará con un lenguaje familiar que escuchan continuamente en casa y en el colegio. Este cuento es una herramienta con la que padres y madres podrán continuar reforzando la seguridad de sus hijos e hijas, llenándolos de valores que les ayuden a crear una marca personal con esencia. Al mismo tiempo, toda la familia podrá disfrutar coloreando las ilustraciones mientras dejan volar la imaginación.
Sin varita. Thaïs Eineberholm
A través de un diseño sencillo adornado con ilustraciones que ayudan a los niños a imaginar , 'Sin Varita', dirige a los más pequeños de la casa a un mundo lleno de magia y fantasía. Thaïs Eineberholm narra una historia que refleja la importancia de la amistad, lo cruel que puede ser la soledad y la coraza que ya desde niños muchos nos imponemos para ocultar al resto nuestra fragilidad.
Por medio de ilustraciones apoyadas sobre poesía, la autora, hace de guía por un mundo mágico donde no existen diferencias. Esta escritora ha creado un refugio rodeado de naturaleza y animales para todos aquellos niños y no tan niños a los que, a veces, el mundo les resulta un lugar solitario y poco amistoso. Dentro de las páginas de ‘Sin varita’, los peques podrán apreciar la belleza y la paz que encierra la naturaleza, así como el amor y cariño que se esconde tras los animales.
Érase una vez un jardín, un oso y un hada. Judith Sánchez
Es un cuento que surge de la mano de una autora que convina su pasión con su trabajo como psicopedagoga y docente y escribió este libro con la intención de ayudar a sus lectores a trabajar el mundo de las emociones desde una edad temprana. De forma que cada lector pueda descubrir sus miedos y afrontarlos, así como reconocer sus emociones y sentimientos y aprender a compartirlos.