Todos somos conscientes del valor de un libro, pero también lo somos de que las generaciones venideras cada vez tienen menos interés por leer y mucho menos en verano. Por ello, a continuación compartimos unos consejos para tratar de incentivar su interés.
Profesores como padres coinciden en la importancia del hábito de lectura desde una edad temprana. Los libros juegan un papel fundamental en el desarrollo cognitivo y emocional de los más pequeños y ayudarles a interesarse por ellos es vital para su educación.
Inculcarles un hábito de lectura desde pequeños favorece a expandir su capacidad de análisis y atención, a la vez que enriquecen su vocabulario y le enseña a expresarse mejor y ni que decir tiene multiplicará su imaginación.
Si ya es complicado que los pequeños de la casa se interesen por la lectura durante el año, cuando hablamos de hacerlo en verano es ya una tarea casi imposible. Durante el curso los niños suelen estar más habituados a leer, principalmente por la tareas que tienen que realizar. Si embargo, durante las vacaciones prefieren relajarse y disfrutar del tiempo libre con sus amigos, que es lo normal, y por esto, es muy importante prestarles mucha atención y no dejarles que pierdan el hábito de lectura.
Sin lugar a dudas, el verano es de las mejores épocas del año, así que disfrútalo con tus hijos sin olvidarte de la lectura.